Asesoria Control de Perdidas

Reducción de pérdidas

El fin primordial de un programa de reducción de pérdidas es lograr la disminución de los niveles de perdida de agua con el objetivo de aumentar considerablemente los índices de continuidad y rentabilidad de la prestación del servicio de agua.

Cuando se hacen tratamientos de agua se incurren en gastos importantes que representan grandes costos de inversión, por lo que el valor de cada metro cúbico (m3) es representativo y al presentarse fugas debe considerarse como una pérdida de dinero, ya que al realizar el proceso de tratamiento del agua se aplican insumos para tratarla así como personal encargado y uso de recursos como energía en el bombeo para llevar el agua a los sitios elevados.

Lo anterior involucra todos los esfuerzos necesarios para lograr que la cantidad de agua perdida por fugas sea la mínima, por lo que la reducción de pérdidas es esencial para lograr detectar daños, que los medidores de las viviendas sean efectivos.

Control de pérdidas

El proceso de control de pérdidas se refiere al programa, que incluye métodos y procedimientos, que busca neutralizar los efectos de las pérdidas reales o comerciales, así como pérdidas potenciales.

Un programa de control de pérdidas debe incluir la realización de mediciones de niveles de tanques, caudal y presión en las redes de transmisión y distribución, modelación hidráulica de la red, con el fin de poder definir la mejor opción de operación de la red.

Para lograr los objetivos de este programa, se plantea dividir la red en diferentes sectores, lo cual permite poder controlar los diferentes parámetros de caudal, presión y operación. Esta sectorización busca alcanzar una distribución más uniforme de las presiones en el sistema con el fin de reducir las pérdidas técnicas como comerciales de agua.

Esta herramienta también nos permite controlar los consumos, número y tipos usuarios que existen en el sector, y de esta forma poder minimizar el número de pérdidas.

Detección de fugas

Programa para la detención de daños consiste en la localización de fugas que se presenten en la red, la revisión y reparación de redes, así como la evaluación de los medidores con el fin de lograr cálculos precisos y correctos en cuanto a la medición del agua. Actualmente, se utilizan diferentes tecnologías e instrumentación para este tema como el geófono, correladores acústicos, detectores de gases (helio).